El Fiscal Superior de Justicia de Galicia recibe un paquete que contiene, además de una carpeta con noticias de varias muertes sin relación aparente, una novela. A partir de ahí se van alternado varios fragmentos argumentales: la confesión de un anciano que trabajó en un pazo gallego en el que se invitaba a nazis, una dramática historia de represión del pasado (situada en la postguerra, con la presencia de nazis en la Ribera Sacra) y, la novela, una narración de la actualidad, en primera persona y por el verdadero protagonista, un atrevido taxista, investigador en los ratos libres, que acepta el encargo de un conocido político y empresario para desentrañar un supuesto pasado nazi con el que sus enemigos pueden relacionarlo, pues acaba de recibir una carta desde Argentina de un miembro del Centro Simon Wiesenthal, la organización para la localización de nazis.
De esta manera comienza, además de una intensa y atractiva búsqueda por la geografía física y humana de Galicia, una peligrosa investigación sobre uno de los hechos históricos más intrigantes y ocultos de nuestra posguerra: la misteriosa «Ruta de las Ratas» a su paso por el noroeste de la península Ibérica y que, desde Vigo, los llevaba hasta el refugio nazi en Sudamérica.
Reina, el sabueso taxista, con la ayuda de dos colaboradores muy especiales, una lectora empedernida llamada Lelia y un cerebrillo metomentodo apodado Barrabás, revolverá cielo y tierra hasta ir, poco a poco y muy dosificadamente, desentrañando los secretos familiares del político, don Manuel y encajando las piezas de la trama para llegar a un final apoteósico.